lunes, 19 de abril de 2010

Cest fini

Dicen que lo bueno, si breve , dos veces bueno. Y una leche. Si es bueno no tiene que acabar nunca. No debería. El caso es que 20 dias de vacaciones están a punto de expirar. Y en lugar de regocijarme por el hecho de que pronto volveré a subirme al carrusel del vertiginoso mundo laboral y reencontrarme con mi apasionante profesión, heme aquí quejándome como una colegial a quien no le gustan las clases de matemáticas e intentando buscar una excusa para no ir al cole. Una veintena de dias son suficientes para ver las cosas desde otra perspectiva. Desde otro ángulo. Desde el otro lado del yugo devastador que destroza nuestros ideales por culpa del imperativo y dictador modus operandi que nos rodea. Éstos dias he recuperado la alegría haciendo cosas absolutamente "normales". De hecho creo que ahí radica la felicidad. La ausencia de artilúgios que no nos dejan ver las cosas con la nitidez necesária. Yo solo necesitava ver que levantarse a las 8 en punto de la mañana y preparar desayunos, vestir y peinar a tus hijos, quedarse en el rellano de la puerta, alzar la mano para despetirte de ellos o lanzar un beso al aire, no tiene precio. Sobre todo cuando hace mas de un año que tu trabajo nocturno te impide vivir en el horario habitual del resto de los mortales. Dicen que trabajar de noche es malo para la salud. Y que vives menos. No me extraña. Te lo pierdes todo. O casi todo. Cuando ellos van, tu vienes. Cuando ellos se levantan tu hace poco que te acostastes. Cuando comen, tu desayunas. Cuando cenan, tu comes. Cuando duermen tu trabajas. Pues creo que ha llegado el momento de hacerse la gran pregunta: ¿vale la pena? Desde el punto de vista profesional no me voy a quejar. Me encanta la radio. La adoro. Llevo 22 años en ella y me siento querida y respetada. Pero no se si el precio que pago en mi vida personal es demasiado alto. En las ondas me queda mucho por decir y ofrecer, pero en mi vida real, el tiempo pasa rápido. Demasiado. Y los hijos crecen. Demasiado. Y yo no quiero perderme ninguna "entrevista exclusiva" con ellos. Quiero leer de primera mano todas sus "exclusivas"...

Plus: Giselle, mi hija mayor, en una de las fotos de su ultima sesión. Hoy es "portada" en mi post. Su blog sueco.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Eres la mujer fantastica... la amiga que todos queremos y una mujer maravillosa...Besos. May.

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